Es normal ver a los recién papás agotados, con ojeras incluso durmiéndose en el estudio más rápido que sus bebés. Pero Melissa y Andrés fueron la excepción, amanecidos, cansados pero felices, llenos de chochera y haciéndome la competencia con sus celulares ☺
Las fotos de Melissa en su sesión de embarazada quedaron soñadas (míralas haciendo click aquí) y las de Barbarita no podían quedarse atrás. Primero elegimos los vestuarios y colores que utilizaríamos. Y cuando esta princesa ya estaba dormidita empezamos!
Mi set favorito fue el amarillo, casi no utilizo este color y a ella le quedó perfecto! Pasó dormidita casi toda la sesión, antes de hacer las fotos familiares se fue despertando y ¿cómo no? con tanto engreimiento no quiso perderse a sus papis posando.
En un par de meses Barbarita va a crecer y este recuerdo es lo mejor que sus papis podrán tener de esta etapa un poquito difícil, pero adorable y la más linda!
